martes, 5 de julio de 2011

División XXX (Parte IV)

ADVERTENCIA:
El texto que van a leer a continuación no es apto para menores ni para mentes cerradas porque contiene alto contenido sexual, violento y lenguaje soez que puede herir su sensibilidad, si es una de esas personas susceptibles, no lo lea.

Al poco rato de bombeo y forcejeo noto que no hay resistencia de aquel desconocido al que estaba castigando por robarme mi ropa y que podría pegarme un tiro en la frente, al contrario estaba recreándose en lamer la punta de mi miembro y dando lametones a lo largo y ancho de mi rabo. Mi furia se fue apagando y la excitación aumentando porque estaba empezando a notar que mi lujuria iba en aumento, mientras el seguía dándome placer yo intentaba quitarle la camisa, cuando lo consigo veo que lleva una camiseta blanca de interior sin mangas en cuyo escote se insinuaba una suave mata de vello que le daba un aspecto muy masculino.

De repente como si fuera el despertar de un sueño, el desconocido que ahora se recreaba con mi trozo de carne, reacciona e intento revolverse, este ademán de revolución lo pago recibiendo un pequeño mordisco en la mitad de mi hombría que me produce un dolor parecido a un golpe en la rodilla, un dolor seco.

-¿Que haces facha de mierda? – Le suelto propinándole un puñetazo en la mejilla aun todavía encima de el, al momento de su boca comienza a salir un hilo de su roja intensa sangre. Porque aunque el odie en esta maldita guerra a todo lo que sea roja, su sangre es del mismo color que el de cualquier ser humano, roja.

-Cabrón me has hecho daño – Me espeta mi contrincante en ese momento en esta lucha entre pueblos, hermanos donde todos somos carne de cañón, desde las clases mas bajas hasta el mas noble pasando por los grupos religiosos porque es de vox populi la ejecución de religiosos y religiosas en distintos lugares de la provincia y la destrucción de obras de arte de carácter religioso. De esto ultimo soy contrario, porque aunque no soy creyente respeto cualquier tipo de religión mientras no atente contra mis ideas y mi libertad.

-Quieres sentir el verdadero dolor? – Vuelvo a responderle con otro puñetazo y después sacándole el cinto del pantalón y atándole los pies y con la camisa que le había sustraído antes le ato las manos a la altura de la cabeza quedando así a mi merced y a mi total y lujuriosa voluntad.

Ahí lo tenia, atado de pies y manos y yo con un gran excitación aun desnudo y con mi pene erecto, la fiesta iba comenzar en el momento en que le rajo la camiseta interior y se descubre ante un trabajo y velludo torso, pectorales completamente marcados y un vientre plano con un hilillo de vello que le nacía del pecho y se perdía en el pubis aun tapado por su pantalón al que de inmediato bajo junto a su ropa de interior y sale disparado hacia mi su pene en un brutal estado de erección.

-Vaya, creo que encima de facha maricón, vaya empalme, pero eso no es lo que busco. – le digo mientras con algo de esfuerzo le doy la vuelta y se descubre ante mi un culo bastante bien formado con algo de vello. – Y ahora veamos que puedes ofrecerme - Le digo posando mi mano derecha en uno de los cachetes de  su prominente y excitante trasero…

(continuará)